La propiedad y la izquierda
Quebrantar la propiedad privada es inmoral, ineficaz, injusto y peligroso.
Quebrantar la propiedad privada es inmoral, ineficaz, injusto y peligroso.
La moral da el salto a la política, socavando el fundamento de la libertad, que es el poder limitado.
La propuesta populista de reducir la jornada laboral a 4 días no salió adelante, pero no fue un fracaso político.
Si acabamos por pensar y sentir que reinas y reyes son en verdad como nosotros, la culpa, en parte, también es nuestra.
Las consecuencias nocivas del crédito barato y el mayor gasto público suelen ser ignoradas.
El antiliberalismo practica un doble truco a propósito de los impuestos. Por un lado, asegura que es bueno subirlos. Y, por otro lado, proclama que no es posible bajarlos.