Adiós a los bancos, menos a los centrales

Según Miguel Ángel Fernández Ordóñez [Adiós a los bancos, Taurus] hay que impedir que la banca privada pueda crear dinero. Esto significaría el fin de los bancos tal y como los conocemos, porque su negocio fundamental estriba precisamente en la creación de dinero de la nada, gracias al sistema conocido como reserva fraccionaria. La potencia desestabilizadora de dicho sistema, por su tendencia a  descontrolarse y a generar burbujas de deuda y crédito, y colapsos bancarios, ha sido denunciada por diversos economistas desde el siglo XIX. Sin embargo, las propuestas lanzadas para acabar con la reserva fraccionaria e implantar un encaje o coeficiente de reserva del 100 % no han fructificado.

(Entra aquí para leer la reseña en El Cultural de El Mundo.)